La detección es sencilla, el cáncer colorrectal no lo es

Hombre aprensivo en la sala de espera del centro médico.Se considera que el cáncer colorrectal es prevenible, pero las pruebas de detección se suelen posponer. Lamentablemente, este tipo de cáncer es un problema de salud grave que afecta a miles de personas cada año, e ignorar los hechos no hace que desaparezcan.

Comprender los factores de riesgo

Cuando se trata de afecciones complejas, intervienen muchas variables. Los factores de riesgo, tanto los que están bajo el control de una persona como los que están fuera de él, pueden afectar la probabilidad de desarrollar cáncer colorrectal, entre ellos:

  • Fumar
  • Beber alcohol
  • La falta de ejercicio
  • Dieta no saludable
  • Obesidad
  • Historia familiar
  • Enfermedades inflamatorias del intestino (enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa)
  • Diabetes tipo 2

Sin embargo, no siempre existe una razón para que una persona desarrolle cáncer. Por eso es tan importante hacerse exámenes de detección con regularidad.

Sepa lo que esta buscando

En algunas personas, el cáncer colorrectal no produce ningún síntoma. En otras, puede manifestarse mediante algunas señales comunes. Preste mucha atención a los mensajes que pueda estar recibiendo de su cuerpo, especialmente si se trata de alguno de los siguientes:

  • Los cambios en los hábitos intestinales
  • Sangrado rectal o sangre en las heces
  • Dolor o malestar abdominal
  • Pérdida de peso inexplicable
  • La anemia por deficiencia de hierro

La importancia de la detección temprana

La detección temprana es la herramienta más poderosa para la detección temprana. Cuando se detecta en una etapa temprana, las probabilidades de un tratamiento exitoso pueden ser significativamente mayores. Por este motivo, se han revisado las pautas para la detección del cáncer colorrectal para comenzar a los 45 años en lugar de a los 50.

La Sociedad Estadounidense del Cáncer recomienda que las personas en riesgo promedio Comience con exámenes regulares a los 45 años.

Esto es diferente para aquellos en riesgo aumentado o alto, a quienes se les aconseja comenzar antes A los 45 años, con pruebas más frecuentes y específicas. Para estas personas, su médico es el mejor recurso para determinar cuándo y cómo realizar las pruebas de detección.

Ya no es un problema de “adultos mayores”

El cáncer colorrectal se ha convertido en una preocupación creciente entre los grupos de edad más jóvenes, es decir, los adultos menores de 50 años. Un estudio descubrió que los diagnósticos entre los menores de 50 años han aumentado con el tiempo.*

Este estudio también descubrió que había cuatro síntomas de “alerta roja” que eran más comunes en aquellos a quienes se les diagnosticaba cáncer colorrectal de aparición temprana. Esos cuatro síntomas eran dolor abdominal, sangrado rectal, diarrea y anemia por deficiencia de hierro. Cuando se experimentan por separado o de manera intermitente, estas señales de advertencia pueden fácilmente ignorarse como problemas menos urgentes, cuando pueden atribuirse a algo tan grave como el cáncer colorrectal.

La postergación podría costarte más de lo que crees: hazte una prueba de detección.

Fuente: Instituto Nacional de Salud